La mayor parte de los políticos son, cuando menos, singulares. Son capaces de defender argumentos opuestos en días sucesivos sin que les varíe lo más mínimo el tono de voz (ya no me atrevería a decir que incluso convencidos ;).…
Siempre es preciso medir nuestras palabras por una cuestión básica de adecuar nuestros pensamientos a nuestro discurso pero en el ámbito público (políticos o personalidades que por su actividad profesional o social tienen especial relevancia) esta necesidad es ineludible. Lamentablemente,…