¿Cuál es el recurso más escaso en el ecosistema digital? La atención.
Estamos saturados de información: redes sociales, publicidad, medios, empresas, marcas…
Tenemos un acceso casi ilimitado a la información, pero nuestro nivel de conocimiento sobre multitud de temas no aumenta.
Es más, la proliferación de campañas de desinformación nos hace cada día más vulnerables: cambio climático, vacunas, coches eléctricos… Todo el mundo opina sobre temas de los que no tiene ni idea.
Las opiniones me parecen todo lo que se quiera menos respetables. Todas las opiniones son discutibles, si no fueran así dejarían de ser opiniones para convertirse en axiomas o dogmas. Fernando Savater, en Diccionario filosófico
Y tal y como ocurre con nuestra salud, nuestros pensamientos también dependen, en último término, de lo que consumimos.
Por eso, me ha parecido tan revelador el artículo de Farnam Street sobre el filósofo Arthur Schopenhauer y sus reflexiones sobre la escritura y la lectura.
En resumen, para mejorar nuestra lectura, el primer y principal paso es evitar la basura. Nunca deberíamos leer algo malo (la vida es corta y el tiempo, limitado 😉).
Cuanto más toleremos la mala escritura (información), más proliferará. En un círculo vicioso, que erosiona la calidad del pensamiento y la comunicación y que ya parece haberse iniciado.
Cuanto más toleremos la mala escritura (información), más proliferará. En un círculo vicioso, que erosiona la calidad del pensamiento y la #comunicación Share on XY nos propone la lectura como un acto de resistencia intelectual. Hemos de ser implacables en nuestro criterio (filtrar, filtrar y filtrar) y solo confiar en fuentes que nos aporten valor.
Evitar las noticias, por ejemplo, optar por obras clásicas, seleccionar cuidadosamente nuestras fuentes y trabajar en la forma en la que escribimos, para mejorar la forma en la que pensamos.
People who think well, write well. David Ogilvy
Si queremos elevar el nivel de nuestro pensamiento y comunicación, debemos ser selectivos con lo que permitimos que entre en nuestras mentes.
En palabras de Schopenhauer, una dieta de comida chatarra intelectual solo nos hundirá más en el fango del pensamiento superficial.
Esta semana se cumplen 14 años desde que iniciara este blog. Y quisiera agradeceros vuestro interés, a todos los que en alguna ocasión os habéis asomado a él.
Estos últimos meses he publicado bastante menos, por motivos de trabajo, pero intentaré hacer un esfuerzo y retomar el ritmo anterior de publicaciones. [Mi desencanto creciente hacia las redes sociales y la deriva que muestran tampoco ayudan ].
Imagen: Unsplash