Uno de los efectos colaterales de la pandemia que vivimos ha sido la creciente valoración de la comunicación y sus profesionales en el seno de las empresas.
La mejor o peor adaptación de cada organización a estas circunstancias ha dependido, en buena medida, de la comunicación.
Y no se trata de un elemento aislado. La evolución actual de nuestras sociedades, el ritmo en el que nos movemos y los cambios que vivimos convierten a la comunicación en el elemento central de cualquier estrategia.
La evolución actual de nuestras sociedades, el ritmo en el que nos movemos y los cambios que vivimos convierten a la #comunicación en el elemento central de cualquier estrategia Share on XCómo explicar, adoptar, interiorizar y aprovechar tendencias tan vertiginosas como el teletrabajo (prácticamente inexistente en España hace un par de años), el trabajo híbrido o la integración creciente de colaboradores por proyectos, fuera de las estructuras tradicionales de las empresas.
No es una percepción personal, una reciente encuesta indica que el 80 % de los profesionales estiman que su trabajo está mejor valorado que nunca.
Hay algunos nubarrones en el horizonte. Vivimos, como afirma José Manuel Velasco, un momento de desconcierto, porque tal y como se recoge igualmente en esta encuesta:
- Los profesionales de la comunicación tenemos demasiadas prioridades. La gestión de la reputación es una labor tan extensa como ambigua, que exige medios y conocimientos que en muchas ocasiones hay que buscar fuera.
- La relación con los medios también ha crecido en dificultad. Cada día son más diversos, están más atomizados y responden a dinámicas cambiantes.
Una buena estrategia en este ámbito es preguntarnos cómo nos relacionamos con nuestros clientes y qué podemos hacer para mejorar esta conexión.
- El contenido patrocinado (no solo la publicidad, sino la voz de la organización) cada vez tiene menos credibilidad.
- Y existe una demanda creciente hacia las organizaciones para que muestren una posición clara en temas de interés para sus públicos, para su comunidad.
Por todo ello, es el momento de reivindicarnos, como profesionales, y de reivindicar el noble arte al que nos dedicamos.
Fuera complejos. Hay muchas cosas que hacemos y que hacemos mejor que nadie.
No me habléis de honestidad, dadme algo que me haga llorar, Sidonie
Es el momento de dar un paso adelante. Ahora o nunca, por nuestro propio bien y el de las organizaciones para las que trabajamos.
Es el momento de reivindicar la #comunicación, con mayúsculas. Fuera complejos. Hay muchas cosas que hacemos y que hacemos mejor que nadie Share on XFuente de la ilustración: Pixabay