Acabo de finalizar el último libro del psiquiatra Luis Rojas Marcos, Superar la adversidad. Admiro no sólo su capacidad profesional sino su faceta divulgadora; sus textos son una delicia no sólo por lo que cuentan y lo que descubren sino por cómo lo hacen, con un estilo sencillo y claro, hasta para el autor de este blog. La suma de alusiones, referencias, anécdotas y citas que encierra esta obra me han hecho reflexionar en torno a la vida y a su posible influencia en otra ciencia, tan cercana a las percepciones de la realidad, como la comunicación.A continuación expongo algunas de las principales lecciones que he extraído y que me gustaría compartir:
- «Casi nadie se libra de sufrir alguna desgracia a lo largo de la vida. Según cuantifican varios estudios (…), los habitantes de los países de occidente no abandonan este mundo sin antes haber afrontado, por término medio, dos serias adversidades que pusieron en peligro su integridad física o mental». Relativicemos, pues, nuestras pequeñas desgracias cotidianas, tomemos perspectiva y encaremos los problemas, también los retos y reveses profesionales, con la mejor disposición.
- «(…) 3 leyes de vida: la primera, vivir nos propina terribles golpes. Unos son previsibles; otros insospechados. La segunda, el azar y la probabilidad son elementos decisivos e insoslayables de nuestra historia. La tercera, cuando afrontamos adversidades, lo más común es superarlas».
- «Es de sentido común que una razonable actitud previsora nos puede ahorrar bastantes disgustos. Sin embargo, abundan las personas que se muestran reacias a la prevención ¿Cómo explicar esta contradicción? Pienso que (…) una razón por la que las medidas preventivas no convencen es porque dan frutos a largo plazo, mientras que en nuestra sociedad se celebran los beneficios inmediatos, aquí mismo y ahora mismo». Cada palabra podría aplicarse casi al pie de la letra a la gestión de la comunicación como herramienta estratégica; solemos acordarnos de sus beneficios sólo cuando estalla una crisis y entonces, casi siempre, ya es demasiado tarde.
- Rudolph Giuliani, ex alcalde de Nueva York: «En las crisis, mejor errar por exceso de información que por defecto, siempre que ésta sea verídica».
- «Las personas que gozan de la capacidad de explicar las circunstancias desfavorables en un contexto jocoso o humorístico las afrontan mejor». «En las crisis, el sentido del humor es algo muy serio«.
- Proverbio chino: «Todas las crisis tienen dos elementos: peligro y oportunidad. Con independencia de la peligrosidad de la situación, en el corazón de cada crisis se esconde una gran oportunidad. Abundantes beneficios esperan a quienes descubren el secreto de encontrar la oportunidad en la crisis«.
Como colofón, una anécdota a propósito de la importancia de centrarnos en los recursos a nuestro alcance que nos ayudan a manejar circunstancias de emergencia:
«Uno de esos psicoanalistas -que viven día y noche abstraídos en el mundo de las fuerzas inconscientes- viajaba en el ferry que cruza la bahía entre Manhattan y el barrio de Staten Island. El mar estaba revuelto y a su lado iba sentado una señora que en un momento exclamó con una sonrisa nerviosa: ‘Pues a mí estas mareas no me producen el más mínimo miedo’.
Al oírla, el psicoanalista le preguntó con un gesto de superioridad: ‘¿Nunca aprendió que negar la realidad es uno de los mecanismos de defensa inconscientes más usados?’ ‘No’, respondió la mujer sin darle muchas vueltas. ‘Señora, pues siento decirle -espetó el analista con autoridad- que ha desperdiciado media vida’.
Unos minutos después, la tormenta se intensificó y el trasbordador comenzó a escorarse peligrosamente. La mujer se dirigió al doctor y le preguntó: ‘¿Aprendió usted alguna vez a nadar?’. ‘Pues no, ¿y qué?, contestó el analista con displicencia.
‘Pues me temo que ha desperdiciado toda su vida. ¡Nos estamos hundiendo!’.
2 Comentarios
Oscar Román
Muy cierto lo que dices, Sr .com. Efectivamente la adversidad es parte de la vida, el optimismo, el humor y la perseverencia son necesarios para afrontarla. Quien supera una crisis gana experiencia, máxime si ha hallado oportunidades ocultas.
Luis Miguel Díaz-Meco
Celebro que compartamos puntos de vista. Como bien dices, Óscar, quien supera una crisis gana en experiencia y se convierte en cierta medida en otra persona, más sabia.
Un saludo desde España y gracias por asomarte al blog.